El embarazo es un proceso hermoso y único. Durante esta etapa es importante mantener una alimentación saludable, ya que además de nuestro bienestar, estamos cumpliendo un rol esencial para la salud y el desarrollo del bebé.
Entre los alimentos que deberían evitar o consumir con moderación está la mortadela. Por eso, en El Koala Verde, te explicamos toda la información que necesitas saber al respecto. ¿Puedo comer mortadela si estoy embarazada? ¿Cuáles son los riesgos de incluirla en mi dieta? Esto y mucho más respondemos en este artículo.
Te suministraremos los consejos necesarios para seguir una alimentación saludable durante el embarazo para evitar posibles complicaciones. Hablaremos acerca de los riesgos de comer mortadela y de las recomendaciones para tu salud.
¿Es seguro comer Mortadela durante el embarazo?
La mortadela es un alimento que a menudo se consume durante el embarazo. Pero, ¿es seguro comer mortadela cuando se está embarazada? El comezón puede ser una pregunta bastante frecuente entre las mujeres embarazadas, por lo que aquí hay información que le ayudará a entender qué riesgos y beneficios hay asociados con la mortadela.
La mortadela contiene nutrientes como la proteína, los lípidos, los carbohidratos, la vitamina B12, el zinc y el hierro. Estos nutrientes son vitales para el desarrollo del bebé, y también para mantener el bienestar y la salud de la madre embarazada. Por lo tanto, comer mortadela durante el embarazo puede proporcionar una cantidad importante de nutrientes y ayudar a garantizar que la madre esté obteniendo suficientes nutrientes.
Sin embargo, también hay algunos riesgos asociados con el consumo de mortadela durante el embarazo. En primer lugar, la mortadela contiene altas cantidades de sodio, lo que puede aumentar significativamente la presión arterial. Además, el alto contenido de grasa en la mortadela puede aumentar el riesgo de desarrollar complicaciones en el embarazo. Por último, la mortadela también contiene nitratos, que pueden causardaños en la salud fetal.
Debido a estos riesgos, es importante que las mujeres embarazadas sean conscientes del consumo de mortadela y sigan las recomendaciones de los profesionales de la salud. Para comer mortadela con seguridad durante el embarazo, se recomienda seguir los siguientes consejos:
- Consuma la cantidad adecuada. Comer demasiada mortadela durante el embarazo puede ser perjudicial. Por lo tanto, se recomienda que los adultos sigan una dieta variada y consume 2-3 porciones de comida al día.
- Evite la carne de cerdo curada. La mortadela curada, como el salami, el jamón ahumado y otros alimentos similares, pueden contener bacterias peligrosas para el feto, como la salmonela y el estafilococo. Por lo tanto, es importante evitar estos alimentos.
- Asegúrese de que la mortadela sea de buen sabor. Se recomienda comprar la mortadela de un proveedor de confianza para garantizar que sea de buen sabor y libre de bacterias.
- Manténgase hidratado. Se recomienda beber al menos 8 vasos de agua al día para evitar la deshidratación y mejorar la absorción de nutrientes.
En resumen, los nutricionistas generalmente recomiendan que las mujeres embarazadas limiten el consumo de alimentos como la mortadela debido a sus riesgos potenciales para el feto. Por otro lado, si se toman los debidos cuidados, comer mortadela puede ser seguro y ofrecer muchos beneficios para la madre embarazada y el bebé.
Cómo elegir una Mortadela saludable
Cuando se trata de alimentos saludables, elegir la mortadela correcta es la clave para disfrutar de sus beneficios nutritivos sin entrar en peligro la salud. Las mortadelas varían mucho en términos de contenido nutritivo, conteniendo una gran cantidad de grasas saturadas y sodio a menudo. Es importante que conozcas los diferentes tipos de mortadela, los que contienen menos grasas y sodio, y sepa cómo leer y comprender las etiquetas de los productos para conocer los detalles de su contenido nutritivo.
Existen dos tipos principales de mortadela: tradicional y light. La mortadela tradicional se fabrica a partir de carne de res y diferentes especies, y generalmente contiene un mayor contenido de grasas saturadas y sodio que la mortadela light, que contiene menos carbohidratos, grasas y sodio. Si estás embarazada, elegir mortadela light ayudará a controlar tu consumo de grasas y sal, lo que es importante para tu salud.
Además de escoger entre los tipos de mortadela, es importante estar atento a las etiquetas de los productos. Muchas marcas enumeran los ingredientes y los valores nutricionales en su envase, lo que te permite determinar fácilmente el contenido de grasas, sodio y calorías. Ten cuidado con las etiquetas que dicen «bajo en grasas» o «sin sal» ya que aún pueden contener grandes cantidades de grasas y sodio.
En resumen, cuando se trata de elegir la mortadela correcta, siempre está mejor optar por una que sea baja en grasas saturadas y sodio. Comenzar con la mortadela light es una buena forma de empezar y, una vez que hayas explorado las etiquetas, no dudes en recurrir a los alimentos a base de plantas para obtener proteínas y nutrientes adicionales. Por último, es importante recordar que aquellas mujeres embarazadas deben evitar comer algo que no puedan probar para evitar los riesgos de intoxicación alimentaria.
Incorpora la Mortadela a tus Comidas de una Manera Saludable
La mortadela es un salame hecho con carne magra y grasas, que se engloba en la categoría del embutido. Por lo tanto, algunas personas evitan consumirla al estar embarazada, pues tienen temor de enfrentar algún problema de salud. Sin embargo, con las recomendaciones adecuadas podés incorporar la mortadela a tu alimentación sin riesgos como buena fuente de proteínas.
La mortadela es uno de los alimentos más completos que podés encontrar en el mercado. Contiene una buena dosis de proteínas, vitaminas y minerales, así como también los ácidos grasos que ayudan al desarrollo de tu bebé. Además no solo la mortadela es una buena fuente de estos nutrientes, sino también la carne de cerdo tierna y magra, el jamón crudo y el queso.
Si deseas incorporar la mortadela a tus comidas diarias, estas son algunas recomendaciones:
- Siempre asegurate de que la mortadela esté cocida.
- Intenta incorporarla con otros alimentos saludables para mantener una dieta balanceada y obtener la mayor cantidad de nutrientes posible.
- Cocina con poca sal y usa aceite de oliva virgen extra.
- No agregues salsas o condimentos que contengan nitritos, ya que podrían afectar tu salud y la de tu embarazo.
- Busca recetas saludables donde puedas agregar mortadela sin afectar tu dieta.
Otra manera de incluir la mortadela en tu comida diaria es usando recetas saludables que combinan esta salchicha con granos, como aquellas que incorporan arroz integral, trigo bulgur, cebada perlada, lentejas, etc.
También, trata de utilizar los alimentos combinándolos de maneras diferentes para obtener diferentes sabores en cada preparación. Esto hará que tengas variedad en tu alimentación y te ayudará a mantenerte en el estado más saludable durante tu embarazo.
Por último y más importante, al incorporar alimentos como la mortadela a tu dieta es recomendado que consultes con tu médico para cerciorarte de que estás tomando la decisión adecuada para cuidar tu salud y la de tu bebé.